Semillas cereza para hacer cojín terapéutico. Como hacer almohadas con semillas.
Están elaboradas con materiales naturales y nos aportan un agradable efecto relajante.
En caliente sirven para disminuir los síntomas de la artritis, los dolores de espalda, cólicos, dolores musculares y de cuello.
En frío la usaremos para las inflamaciones, síndrome del Túnel carpiano, fiebre, pies cansados, migrañas… Consulta con tu médico.
Estuve recogiendo y
limpiando cada semilla de cereza que caía en mis manos para hacer un cojín o
almohada terapéutica y así poder enseñaros algunos detalles y su elaboración.
Estas almohadas son
sencillamente fantásticas, son cojines de masaje que se usan para trasmitir
calor o frío.
Es aconsejable guardarla en
el congelador en una bolsa hermética, y así
si la necesitamos en caliente solo tendremos que añadir unos minutos más
al microondas, ya que el proceso de refrigerado es lento.
Aquí os traigo un tutorial
de cómo hacer una almohada terapéutica.
Primero vamos a enumerar los
materiales que vamos a necesitar, que por cierto se pueden conseguir fácilmente
y son muy económicos.
Una trozo de tela de
algodón.
Hilo de coser, aguja, y
tijeras
Semillas de cereza (limpias
y secas).
Alguna hierba aromática.
En mi almohada he usado
semillas de cereza, pero se pueden con otras, como por ejemplo el maíz, arroz,
trigo, garbanzos, lentejas, soja…; pero tienen el inconveniente que se pican,
por lo que te duraría tu cojín alrededor de un año, aunque dependerá de las
veces que la uses, cuando veas que es necesario solo tienes que abrir una
costura, cambiar el contenido del saquito y volver a coser. Si la confeccionas
con semillas de cereza te durará mucho más y aguantará más el calor.
Lo ideal es poner junto con
las semillas, algunas semillas que den olor o hierbas aromáticas que, al
calentarlas en la almohadilla, desprendan su aroma y así también podremos
disfrutar de los beneficios de la aromaterapia.
Para hacer almohada
terapéutica de semillas de cereza, tomamos la tela la doblamos por la mitad y
luego marcamos unas líneas a lo largo, por donde vamos a coser, de forma que nos van a quedar bolsillos. Coseremos alrededor dejando un lado
abierto de forma que tengamos acceso a los bolsillos.
Acto seguido vamos a llenar
cada bolsillo con las semillas de cereza y en este caso yo he elegido como
planta aromática lavanda, que al respirarla nos ayudará a relajarnos y a dormir
como un niño ya que es
empleada en casos de insomnio. En este
paso, y como opción a gusto de cada uno, podemos agregarle unas gotas de aceite
esencial del aroma que más nos guste. Una vez llenas procedemos a cerrarlas con
una costura. De esta forma la almohada quedará lista, solo nos falta realizar
el forro que será el que lavemos cada vez que sea necesario, ya que no se puede
lavar la almohada ya que estropearíamos las semillas.
Eso es todo, muy fácil de
hacer y muy útil especialmente para aquellas personas que padecen dolores de
espalda, en cuanto al tamaño no especifique nada porque dependerá del uso que
se le vaya a dar, así que podrás elegir el tamaño que necesites.